Agencias cobran exceso en trámites de visa láser

Intermediarios aprovechan confusión de solicitantes y aplican tarifas abusivas, generando inconformidad entre quienes buscan viajar legalmente a Estados Unidos.

En los últimos meses se ha detectado un aumento de quejas hacia agencias dedicadas a tramitar la llamada “visa láser” para Estados Unidos, ya que algunos intermediarios estarían cobrando tarifas muy por encima del costo real. 

Según José María Lara Moreno, asesor especializado en este tipo de visa, el incremento de los precios que algunas empresas han difundido no se debe a un cambio oficial, sino más bien a abusos por parte de agencias apócrifas.

El costo real vs. lo que cobran las agencias

El precio oficial para tramitar la visa láser se mantiene en poco más de 3 mil pesos por persona, según explica Lara Moreno. Sin embargo, algunas agencias han llegado a pedir entre 5 mil y 9 mil pesos por el mismo servicio, aprovechando la confusión entre quienes no están familiarizados con el procedimiento. Además, algunas compañías suman cargos adicionales, como los 300 pesos que cobraron en agosto por el envío de visas, que luego trasladan al usuario final.

Otro cargo muy criticado es el cobro por comisión bancaria: de acuerdo con las nuevas políticas de Scotiabank, quienes no son cuentahabientes deben pagar un adicional de 30 pesos para completar el pago del trámite de visa. Estos costos extra contribuyen a que algunas personas terminen pagando mucho más de lo necesario.

Modificaciones a las citas no justifican el alza

En septiembre pasado, el consulado estadounidense implementó cambios para la renovación de visas de ciertos grupos: menores y personas de edad avanzada podrían obtener la renovación sin necesidad de presentarse en persona. Sin embargo, algunas agencias han ignorado esta flexibilización y continúan afirmando que el trámite debe hacerse de forma presencial, lo que les permite justificar sus tarifas más altas.Para Lara Moreno, esta estrategia se usa como pretexto para elevar los precios: “Utilizan los cambios anunciados por el consulado para justificar tarifas injustificadas”, señala. De esta forma, muchas personas que creen estar haciendo el trámite de manera formal terminan pagando mucho más de lo necesario.

Impacto social y contexto estadístico

El problema no es menor. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), entre 2018 y 2023 la población migrante mexicana internacional aumentó considerablemente, y de ese total, 10.1 % cuenta con una visa de turista para ingresar a Estados Unidos, de acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID).Además, el mismo organismo reporta que los mexicanos están viajando al extranjero en cifras récord: en 2024 se registraron 7.5 millones de salidas por vía aérea, un aumento de 18.2 % respecto al año anterior. Esto sugiere que la demanda de visas y trámites migratorios es alta, lo que podría ser aprovechado por intermediarios poco éticos para inflar sus tarifas.

Conclusión y llamada a la prudencia

El relato de Lara Moreno pone en evidencia un problema creciente: empresas sin escrúpulos están aprovechando la complejidad administrativa y la falta de conocimiento de muchas personas para cobrar tarifas excesivas, lejos de los costos reales autorizados por los consulados.Para evitar caer en estos abusos, es recomendable verificar siempre con fuentes oficiales cuál es el costo real del trámite, y aclarar con antelación si el intermediario aplica cargos extras (envío de visa, comisiones bancarias, etc.). Las embajadas y consulados de Estados Unidos deben también reforzar la supervisión sobre agentes externos para garantizar que sus políticas no sean distorsionadas por quienes lucran con la necesidad.

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