Jóvenes llevan alimentos a pacientes y personal de la clínica 7 del Seguro Social
Pan, bebidas, una sonrisa y palabras de aliento fueron las que proporcionaron los jóvenes quienes buscaban el bien de los enfermos o sus familiares además del personal.
En Monclova, un grupo de jóvenes comprometidos con la comunidad visitó la clínica 7 del IMSS para entregar pan dulce y bebidas a médicos, enfermeros, pacientes y sus familiares. La iniciativa no buscó protagonismos, sino llevar un momento de alivio y alegría a quienes atraviesan momentos difíciles.
Roberto Treviño, coordinador del equipo de Juventud Verde, detalló que, su objetivo es acercarse con la población y desde sus posibilidades demostrar como los jóvenes están dispuestos a apoyarlos.
Los jóvenes se colocaron a las afueras del bloque B, compartiendo alimentos además de sonrisas y palabras de aliento. Para muchos derechohabientes y familiares, pequeños gestos como estos marcan la diferencia en días complicados. “Nos hicieron sentir acompañados, nos levantaron el ánimo”, coincidieron varios de los beneficiados, quienes agradecieron el detalle y el tiempo que los jóvenes dedicaron a ellos.
Compromiso joven
El coordinador, destacó que esta actividad es una de muchas que los jóvenes realizan para estar presentes en la vida de su comunidad. Con un enfoque cercano y humano, buscan que la juventud no solo sea vista, sino que sea un motor de solidaridad y empatía. Más allá de las cifras o planes, la acción se convirtió en un respiro para quienes enfrentan la enfermedad, un pequeño rayo de esperanza que recordó la importancia de cuidar y acompañar al prójimo.
Con cada jornada, los jóvenes buscan contagiar la iniciativa y la empatía, demostrando que la solidaridad no necesita de grandes anuncios, sino de corazón y voluntad para acercarse a quienes más lo necesitan.
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